Otoño, ¡bienvenido!

Otoño, ¡bienvenido!

En septiembre se acaban las vacaciones, las hojas se caen, comienza un nuevo curso y… ¡cambiamos de estación!

Hoy empieza de manera oficial el otoño, con el equinoccio, una palabra que viene del latín aequinoctium, que quiere decir "noche igual" y se trata del momento en el que las horas de luz diurna se igualan a las de la noche en toda la Tierra.

Pero, ¿qué le ocurre a nuestro cuerpo y a nuestro estado de ánimo con la llegada del otoño?

El otoño es una estación de cambios importantes: las temperaturas bajan, la humedad aumenta considerablemente, las horas de luz se acortan y la presión atmosférica disminuye.

La transformación de la naturaleza y las variaciones del clima influyen en el adecuado funcionamiento del organismo, que también padece alteraciones que afectan al estado físico y anímico de las personas.

Por eso, lo que conocemos como astenia otoñal, un trastorno psicológico lo podríamos llamar “depresión otoñal” ya que los síntomas son parecidos: desánimo, cansancio, desmotivación, dificultad para concentrarnos, somnolencia, etc. Esto se debe al aumento de producción de melatonina que favorece el sueño, y una disminución de la serotonina, la “hormona de la felicidad”.

Y esta no es la única manera en que nos afecta el inicio del otoño: aparecen la gripe y los resfriados por la mayor resistencia de los virus y bacterias en ambientes fríos.

¡Pero no todo son malas noticias!

A nosotras nos encanta el otoño ya que es la estación del año en la que se recoge el algodón plantado y se prepara el campo para la próxima colecta. A finales del invierno (dependiendo de la región), se revisan las malezas y vuelven a arar el campo, para hacer que el suelo sea el adecuado y esté listo para recibir las semillas de algodón que posteriormente usaremos para la confección de nuestras bolsas…

La fibra textil de este cultivo crece alrededor de las semillas de la planta, arbusto que pertenece al género Gossypium de la familia de las malváceas. Esta fibra natural es la más importante del mundo ya que en la actualidad representa casi la mitad del consumo mundial de fibras textiles.

Y a ti, ¿te gusta el otoño tanto como a nosotras?

¡Os leemos!

P.D. No te pierdas nuestro apartado de cómo cuidar nuestro algodón

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